Posts tagged ‘comunicación’

Les dejo una lista de 10 ítems a considerar a la hora de calificar un contratista o tercero:

1. Existencia de QAA (Quality Assurance Agreement) disponible, aprobado y en cumplimiento.

2. Sistemas de Calidad, in place y efectivos.

3. Robustez del proceso de investigación del tercero o contratista.

4. Nivel de comunicación con el laboratorio, ante inspecciones recibidas por ellos o antes eventos que pudieran suceder.

5. Perfil GMP

6. Acciones frente al mercado, por ej. freno de operaciones ante un Recall.

7. Manejo de los cambios

8. Desvíos significativos, tasa de ocurrencia, disponibilidad de los reportes requeridos para la liberación del lote.

9. Reclamos de calidad, cuan efectivo es el sistema de manejo de quejas.

10. Historia de los riesgos, hay riesgos capturados?

Uno podría establecer respecto de estos 10 ítems una clasificación de la siguiente manera:

Riesgo alto:      2 o + de estos ítems altos

Riesgo medio: 1 ítem alto o 2 o + medios

Riesgo bajo:     1 ítem medio y otro bajo.

Bueno esta es una forma de poder evaluar el nivel de riesgo de mi contratista o tercero. Esta claro que debemos efectuar una revisión de todos estos ítem y ponderarlos cuali o cuantitativamente, de manera de poder calificarlos.

Espero que les resulte útil.

 

 

El debate es una capacitación personal en la que se adquiere de modo gradual la habilidad de convencer a otros de las propias ideas o puntos de vista, y convertir al auditorio en aliado del emisor. Es un arte cuyo punto de partida está en las diferencias de opinión. En ciertas ocasiones es confrontativo, busca convencer. En otras, explorativo, y sirve para obtener información imprescindible en la toma de decisiones bien fundadas, definir estrategias o generar conocimientos profundos sobre un tema en concreto.

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La calidad de la comunicación

Un debate bien entendido contribuye a mejorar la calidad de la comunicación verbal y gestual. Obliga a expresar ordenadamente y de manera decisiva conceptos desde diferentes puntos de vista. Enseña a articular ideas de manera clara y rápida, y a pensar críticamente. Invita a analizar, formular, argumentar, presentar el mensaje y además… a ¡escuchar! Es un excelente ejercicio de habilidades de razonamiento, que combina trabajo en equipo, desafío y diversión. En cada uno de nuestros cursos, jornadas y talleres los asistentes aprenden habilidades de suma utilidad para decodificar la estructura de la argumentación de quienes esgrimen opiniones diferentes de las suyas. Conocer al otro, identificar sus modos de razonamiento, leer su lenguaje gestual y descubrir sus razones profundas resulta estratégico para lograr una argumentación sólida capaz de contrarrestar con éxito las ideas del oponente.

Un debate bien entendido contribuye a mejorar la calidad de la comunicación verbal y gestual. Obliga a expresar ordenadamente y de manera decisiva conceptos desde diferentes puntos de vista. Enseña a articular ideas de manera clara y rápida, y a pensar críticamente. Invita a analizar, formular, argumentar, presentar el mensaje y además… a ¡escuchar! Es un excelente ejercicio de habilidades de razonamiento, que combina trabajo en equipo, desafío y diversión. En cada uno de nuestros cursos, jornadas y talleres los asistentes aprenden habilidades de suma utilidad para decodificar la estructura de la argumentación de quienes esgrimen opiniones diferentes de las suyas. Conocer al otro, identificar sus modos de razonamiento, leer su lenguaje gestual y descubrir sus razones profundas resulta estratégico para lograr una argumentación sólida capaz de contrarrestar con éxito las ideas del oponente.

Convencer es la meta

¿Qué es convencer? Es ayudar a decidir, es influir, es contagiar una idea y, en el mejor de los casos, inocularla en la mente del receptor de tal manera que sienta que no hay otra opción posible. El convencimiento lleva al otro a actuar, pero no obligado, sino con la seguridad de haber tomado el mejor camino. Persuadir es obligar al otro a cambiar de idea. Es una de las formas del convencimiento, pero no la única. La disuasión, que lleva al receptor a no tomar una decisión, es otra forma del convencimiento. Ambas versiones buscan torcer una decisión ya tomada. Para convencer hace falta autoridad, que puede estar dada por el conocimiento de la materia que se trata, por los valores del emisor del mensaje, por la posición en que se encuentra, o por muchas otras causas. Y sobre todo, para convencer hace falta conocer al otro, entender sus motivaciones, escucharlo atentamente. Y hacer lo propio con uno mismo.

¿Qué es convencer? Es ayudar a decidir, es influir, es contagiar una idea y, en el mejor de los casos, inocularla en la mente del receptor de tal manera que sienta que no hay otra opción posible. El convencimiento lleva al otro a actuar, pero no obligado, sino con la seguridad de haber tomado el mejor camino. Persuadir es obligar al otro a cambiar de idea. Es una de las formas del convencimiento, pero no la única. La disuasión, que lleva al receptor a no tomar una decisión, es otra forma del convencimiento. Ambas versiones buscan torcer una decisión ya tomada. Para convencer hace falta autoridad, que puede estar dada por el conocimiento de la materia que se trata, por los valores del emisor del mensaje, por la posición en que se encuentra, o por muchas otras causas. Y sobre todo, para convencer hace falta conocer al otro, entender sus motivaciones, escucharlo atentamente. Y hacer lo propio con uno mismo.

Escuchar, esa costumbre en desuso…

Todos hablamos, pocos escuchamos. Y sin embargo, todos queremos ser escuchados. Quien aprenda a escuchar habrá ganado la mitad de la batalla. El debate enseña a escuchar. Pero no como quien percibe la música de la radio, como un fondo de pantalla auditivo. La escucha activa es la que capta tanto los sonidos como los silencios, las muletillas, el lenguaje del cuerpo, las intenciones ocultas en un suspiro, la respiración acelerada, el movimiento de las manos… Todo un mensaje paralelo repleto de información útil a la hora de planear una argumentación.

Todos hablamos, pocos escuchamos. Y sin embargo, todos queremos ser escuchados. Quien aprenda a escuchar habrá ganado la mitad de la batalla. El debate enseña a escuchar. Pero no como quien percibe la música de la radio, como un fondo de pantalla auditivo. La escucha activa es la que capta tanto los sonidos como los silencios, las muletillas, el lenguaje del cuerpo, las intenciones ocultas en un suspiro, la respiración acelerada, el movimiento de las manos… Todo un mensaje paralelo repleto de información útil a la hora de planear una argumentación.

Análisis del discurso

En los cursos de debate gran parte del tiempo se dedica a la planificación de la argumentación. Esta instancia requiere un análisis crítico de lo que se está defendiendo o refutando, para llegar a las razones ocultas del discurso, que actúan sobre el receptor a nivel inconsciente. El análisis crítico es una habilidad poco enseñada en las escuelas, que permite la toma de decisiones consciente y responsable.

En los cursos de debate gran parte del tiempo se dedica a la planificación de la argumentación. Esta instancia requiere un análisis crítico de lo que se está defendiendo o refutando, para llegar a las razones ocultas del discurso, que actúan sobre el receptor a nivel inconsciente. El análisis crítico es una habilidad poco enseñada en las escuelas, que permite la toma de decisiones consciente y responsable.

Argumentación sólida: la casa hecha de ladrillos

En este momento en que el acceso a la información es más democrático que nunca, y cualquier persona, con un dispositivo y una conexión, puede obtener los datos que busque en apenas segundos, el problema no reside en la imposibilidad de llegar al conocimiento, sino en el caudal abrumador de data disponible. El poder ya no es de quien recibe la información, sino de quien sabe seleccionarla y editarla para sus propios fines. Editar es esencial para argumentar. Conocer todas las posibilidades, seleccionarlas concienzudamente y usarlas del modo correcto no sólo puede torcer una decisión ajena, sino –sobre todo- fortalecer los argumentos propios y evitar grietas en el edificio del discurso.

En este momento en que el acceso a la información es más democrático que nunca, y cualquier persona, con un dispositivo y una conexión, puede obtener los datos que busque en apenas segundos, el problema no reside en la imposibilidad de llegar al conocimiento, sino en el caudal abrumador de data disponible. El poder ya no es de quien recibe la información, sino de quien sabe seleccionarla y editarla para sus propios fines. Editar es esencial para argumentar. Conocer todas las posibilidades, seleccionarlas concienzudamente y usarlas del modo correcto no sólo puede torcer una decisión ajena, sino –sobre todo- fortalecer los argumentos propios y evitar grietas en el edificio del discurso.

Cuando habla el cuerpo

Si bien el objetivo es convencer con argumentos sólidos, todo aquello que rodea al mensaje cobra también importancia. Sin ser una clase de oratoria, el curso de debate enseña al ponente a convencer mediante la palabra oral, pero también a transmitir solidez con sus posturas y gestos, y a leer el lenguaje no verbal de su oponente… y de su auditorio. Los movimientos, los tics, las muletillas, las señas pueden entorpecer o facilitar la llegada del mensaje al oyente.

Si bien el objetivo es convencer con argumentos sólidos, todo aquello que rodea al mensaje cobra también importancia. Sin ser una clase de oratoria, el curso de debate enseña al ponente a convencer mediante la palabra oral, pero también a transmitir solidez con sus posturas y gestos, y a leer el lenguaje no verbal de su oponente… y de su auditorio. Los movimientos, los tics, las muletillas, las señas pueden entorpecer o facilitar la llegada del mensaje al oyente.

Autor: Elmer de Ronde

Elmer de Ronde, fundador de Convence, es consultor de negocios y capacitador de debate, con una amplia trayectoria en ambos campos

www.convence.com.ar

 

Permítanme volver sobre este tema, claro que parece algo monótono, pero vuelvo porque es mi objetivo la toma de conciencia.

Creo en uno de los artículos de error humano haber mencionado que no podemos dedicar un ejército de personas de QA a monitorear el proceso de elaboración de un producto a lo largo de todas sus etapas como si fueran ángeles guardianes.

Por otra parte recuerdo lo que mencionamos sobre la investigación de causa raíz en el error humano, no vayan por la opción fácil: reestrenar al operador, recuerden que generalmente no suele ser la causa del error.

Insisto debemos entender porque suceden las fallas.

Quiero aprovechar para dejarles 5 ideas que lo ayudarán a que su personal se centre en las cGMPs.

  • Foco en la tarea, sin distracciones. Entendiendo la importancia que tiene su actividad para el proceso entero.
  • Mejora en la comunicación, sobretodo donde las tareas son continuadas por otro operador, como en el caso de cambios de turnos. Asegurar que quien toma la posta tiene clara la situación reinante.

Trabajo de equipo 399.345

  • Doble chequeo efectivo, porque digo efectivo, veo muchas veces que hay más de dos controles en una operación, pero cada uno piensa y se apoyo en el control del otro, finalmente ninguno lo hace correctamente.
  • Detección y reporte temprano, por supuesto que a nadie le gusta ser el mensajero de la mala noticia, pero cuanto antes se reporte, menores serán los daños. Ojo a los supervisores/jefes/gerentes, con la cultura del castigo.
  • Entrenamiento a conciencia, es importante conocer los procedimientos que regulan nuestra actividad, incluso el aporte de los operadores es clave para la mejora de los mismos, saltearse el entrenamiento, solo firmando el SOP o completando las respuestas que nos pasaron para la evaluación no nos ayuda para nuestra labor diaria.  Entrénese y si tiene dudas consulte.

 

Espero que les haya resultado útil.

La comunicación es la más básica y vital necesidad de los seres humanos, después de la supervivencia. La comunicación es una condición sine qua non de la existencia humana. En una organización, la comunicación es también un factor esencial, permite mantener unidas las distintas partes que conforman la misma. Proporciona un marco adecuado para tomar y llevar a cabo las decisiones, para obtener y transmitir información así como para modificar los objetivos y exigencias de la organización para adaptarse a un entorno tan cambiante. La comunicación bidireccional consiste en un intercambio de información que permite a los empleados emitir sus opiniones y plantear preguntas susceptibles de mejorar la comprensión del mensaje, requiriendo una mayor disponibilidad por parte del gestor.

Ahora bien, es necesario resaltar que para que se pueda dar una comunicación bidireccional es imprescindible saber escuchar. Escuchar no es lo mismo que oír, escuchar implica no sólo utilizar los oídos, sino los ojos y los sentidos para poder determinar y comprender la intención, la emoción y los sentimientos de nuestro interlocutor.

A continuación se detallan los distintos estilos de escucha** y algunos consejos prácticos para llegar a ser un buen oyente:

1.  RESULTADOS: A los oyentes con estilo-resultados no les gusta andarse con rodeos. Les interesa oír primero el fondo de la cuestión o el resultado del mensaje de la comunicación, y a continuación, les gusta hacer preguntas. Estos tipos de comportamiento identifican a éste tipo de oyentes:

  • Van al grano. Pueden parecer bruscos e incluso rudos
  • Están orientados a la acción
  • Están orientados a lo actual
  • Disfrutan resolviendo problemas. Dada su afición a solucionar conflictos y su orientación a la acción, suelen ser buenos gestores de crisis
  • Su interés principal radica en el fondo de la cuestión

2.  RAZONES: Los oyentes con estilo-razones quieren conocer el razonamiento en que se basa el mensaje que se les está comunicando o proporcionando. Han de quedar convencidos sobre un punto de vista antes de aceptarlo. Los tipos de comportamiento que suelen mostrar son:

  • Quieren ver claramente si una solución es o no es práctica, realista y razonable para una situación determinada
  • Lo ponderan y comparan todo
  • Si se les pregunta algo directamente, suelen responder “Depende”
  • Arguyen con fuerza externa o internamente
  • Esperan que se les presenten las ideas de manera organizada. Son poco tolerantes y no muestran respeto alguno por las mentes “desordenadas”
  • Su preocupación principal es “ ¿Por qué?”

3.  PROCESO: A los de estilo-proceso les gusta discutir los asuntos en detalle. Prefieren informarse sobre el tema antes de enzarzarse en un debate a fondo y les gusta cerciorarse ante todo de que el tema sea importante. Se puede identificar a los oyentes de éste tipo a través de estos comportamientos:

  • Su orientación es hacia las personas. Sienten preocupación por las relaciones, persuadidos de que las personas y las relaciones con las mismas son importantes para el éxito a largo plazo.
  • Les gusta conocer la historia completa del asunto antes de tomar una decisión
  • Sienten una gran preocupación por la calidad e insistirán en una solución de calidad para un problema, aún cuando otros puedan tacharles por ello de poco realistas
  • Están orientados hacia el futuro
  • Sus conversaciones son de carácter permanente
  • Su lenguaje y sus mensajes tienden a ser indirectos
  • Sus intereses primordiales radican en como y en los beneficios

Conclusión: los gestores pueden conseguir una mayor aceptación de sus ideas y propuestas adaptando la forma y el contenido del mensaje de forma que se ajuste al estilo de escucha del receptor:

  • Para un oyente de estilo resultados, el emisor debería presentar la cuestión principal al comenzar la conversación
  • Explicar sus argumentos a un oyente de estilo razones
  • Para un oyente de estilo proceso, describir el proceso y los beneficios que se derivan del mismo

 

** Según expertos de comunicación (Kreitner y Knicki, 1996; Bennet y Wood, 1989)

 

Fragmentos extraídos de “Los diez mandamientos para la dirección de personas”, S. L. Dolan-I. Martin, Ediciones Gestión 2000, Barcelona.